Ingredientes:
300 g de macarrones
150 g de jamón serrano en cubos
1 taza de queso cheddar rallado
1 taza de queso parmesano rallado
2 tazas de leche
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de harina de trigo
1 diente de ajo
1 cebolla pequeña
1/2 taza de pan rallado
1 cucharadita de mostaza en polvo (opcional)
Sal y pimienta negra al gusto
1 cucharada de aceite de oliva
Instrucciones:
Preparar la Pasta:
Llena una olla grande con agua y añade una cucharada de sal. Lleva el agua a ebullición.
Añade los macarrones y cocina según las instrucciones del paquete, generalmente entre 8-10 minutos, hasta que estén al dente. Remueve ocasionalmente.
Una vez cocidos, escúrrelos y resérvalos.
Preparar la Salsa de Queso:
Pela y pica finamente el diente de ajo y la cebolla.
En una sartén grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Añade la cebolla y el ajo, y cocina hasta que estén dorados y fragantes, aproximadamente 5 minutos.
Agrega la mantequilla a la sartén y deja que se derrita. Incorpora la harina de trigo y cocina a fuego medio, removiendo constantemente, hasta que la mezcla adquiera un color dorado claro, alrededor de 2 minutos.
Poco a poco, añade la leche mientras sigues removiendo para evitar grumos. Cocina a fuego medio hasta que la mezcla espese, aproximadamente 5-7 minutos.
Añade el queso cheddar y el queso parmesano rallado a la salsa, y revuelve hasta que se derritan completamente y la salsa esté suave. Si usas mostaza en polvo, agrégala en este momento. Sazona con sal y pimienta al gusto.
Incorporar el Jamón y la Pasta:
Agrega los cubos de jamón a la salsa y cocina durante 2-3 minutos para que se calienten.
Incorpora los macarrones cocidos a la salsa, mezclando bien para que la pasta quede completamente cubierta con la salsa de queso.
Preparar el Crumble de Pan:
En un tazón pequeño, mezcla el pan rallado con una cucharada de mantequilla derretida. Puedes añadir un poco de queso parmesano rallado para más sabor si lo deseas.
Hornear:
Precalienta el horno a 200°C (390°F).
Transfiere la mezcla de macarrones y salsa de queso a una fuente para horno. Espolvorea el crumble de pan por encima.
Hornea durante 15-20 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
Servir:
Deja enfriar unos minutos antes de servir para que los macarrones se asienten y sea más fácil de servir.
Este plato de macarrones con salsa de queso y jamón es un clásico reconfortante, ideal para una comida familiar o una cena rápida. ¡Disfruta de esta deliciosa combinación de sabores y texturas!